En el año 2011 se llevó a cabo una encuesta reveladora que planteaba una pregunta clave: ¿A qué edad considerarías acudir a una clínica de fertilidad si no logras quedar embarazada?
La respuesta en España fue sorprendente: la mayoría de las mujeres consideraban que buscarían ayuda médica a partir de los 43 años.
Esto nos lleva a reflexionar… ¿por qué se retrasa tanto el momento de acudir a un especialista en reproducción asistida?
¿Y qué implicaciones reales tiene esperar tanto?
La percepción del tiempo y la salud ha cambiado
Una de las razones principales por las que muchas mujeres retrasan su decisión de buscar ayuda es la percepción de buena salud. Hoy en día, la esperanza de vida ha aumentado, y con ella, la sensación de que el tiempo no corre tan deprisa.
Las mujeres de 50 años se sienten activas, plenas, con energía y en condiciones de asumir nuevos retos, incluyendo la maternidad. No es raro que muchas piensen que si pueden mantener su calidad de vida hasta los 70, también pueden criar y educar a un hijo de forma plena.
Este cambio de percepción, aunque positivo en muchos sentidos, puede generar falsas expectativas sobre la fertilidad natural y los límites biológicos.
La realidad biológica: la fertilidad tiene fecha de caducidad
A pesar de los avances médicos y de nuestra vitalidad prolongada, la biología no ha cambiado:
a partir de los 35 años, la reserva ovárica comienza a disminuir, y con ella, las posibilidades de lograr un embarazo de forma natural.
A los 43 años, como reflejaba aquella encuesta, las probabilidades de embarazo se reducen a tan solo un 1,8%, y además, el riesgo de aborto espontáneo se incrementa notablemente.
Por tanto, aunque muchas mujeres confían en que acudir a una clínica de fertilidad les proporcionará una solución rápida, la eficacia de los tratamientos también disminuye con la edad.
¿Por qué es importante no esperar?
No se trata de alarmar, sino de informar con claridad y responsabilidad. En reproducción asistida, el tiempo es un factor clave, y esperar demasiado puede limitar las opciones.
En Embrio Center siempre recomendamos que, si llevas más de 6 meses intentando quedarte embarazada (si tienes más de 35 años) o más de un año (si eres menor de 35), consultes con un especialista. A veces basta con una revisión y algunas pruebas básicas para saber en qué punto estás.
Además, conocer tu reserva ovárica y tu estado hormonal te permitirá tomar decisiones con más seguridad, sin dejarlo todo en manos del azar o el calendario.
¿Hay soluciones? Sí, pero también límites
Gracias a la ciencia, existen hoy múltiples alternativas: estimulación ovárica, inseminación, fecundación in vitro, vitrificación de ovocitos, ovodonación…
Pero todas estas técnicas son más eficaces cuanto antes se apliquen, y es importante tener expectativas realistas.
Cuanto más esperas, más complejos pueden ser los tratamientos y menores sus tasas de éxito.
En resumen, la edad sigue siendo un factor determinante en fertilidad.
No se trata de apresurarse, pero sí de informarse, planificar y actuar a tiempo.
En EmbryoCenter estamos para acompañarte en ese camino, resolver tus dudas y ayudarte a tomar decisiones informadas.